Bioenergética
Caminar en equilibrio
– Cada persona nace con un poder infinito contra el cual ninguna fuerza terrenal tiene el menor significado –
Neville Godard
¿Qué es la Bioenergética?
La Bioenergética es una ciencia magistral, que nos pone en manifiesto y nos lleva al autoconocimiento, al entendimiento y a la aceptación de que lo que es invisible a los ojos, lo que sentimos y vemos con el alma.
Descubrir toda la grandeza del ser humano, en las condiciones actuales, no solo es una gran oportunidad sino una responsabilidad.
La Bioenergética es, pues, el estudio, comprensión y abordaje de las energías sutiles y su relación con los factores biológicos del cuerpo. Desarrolla la “relación” entre mente cuerpo y espíritu.
¿Qué me aporta la Bioenergética?
Equilibrio
Mantenernos en calma cuando todo alrededor arece muy agitado, es lograr Estar en consonancia entre lo que se siente, lo que se piensa y lo que se hace. Las energías sutiles fluyen a través de nuestro cuerpo manteniendo en un estado de sincronicidad con el mundo externo.
Autoconocimiento
Es un camino de conocernos a nosotros mismos, descubrir nuestras virtudes y defectos, vernos y aceptarnos nos da libertad de espíritu, la sabiduría para hacernos las preguntas correctas, y así nutrirnos de la autovaloración, autoestima y confianza.
Consciencia
Es estar en el momento presente, en la plenitud del ahora, nos facilita el observar lo que acontece de una manera más clara, con perspectiva, lo que disminuye el
estrés y la ansiedad. Se abren ante nuestros ojos un mar de posibilidades que antes no podíamos ver.
Vitalidad y Entusiasmo
Cuando los campos energéticos fluyen, las vibraciones aumentan de nivel, se amplifica la motivación para seguir adelante, nuestro estado anímico mejora y el entusiasmo se mantiene en todas las cosas que hacemos.
Bioenergética: un abanico de posibilidades
Cuando la persona busca respuestas o cambios sobre determinados hábitos no beneficiosos para su integridad física, emocional y energética, podemos, si lo desea, poner en práctica los recursos que ofrece la Bioenergética, desde donde se puede acceder a la información originaria, que permite un tratamiento eficaz y de efectos duraderos.
Terapias
Ponemos a disposición Las herramientas necesarias para encontrarnos en armonía con nuestro propio ser.
Meditación
Lograr aquietar la mente, con meditación guiada en tres pasos:
RESPIRACIÓN: La respiración nos conecta con los centros del cerebro encargados de la relajación y la apertura a niveles de conciencia superior. Conecta el cuerpo con la mente. Es la puerta que abre el camino hacia los pensamientos positivos.
CONCENTRACIÓN: Es el instrumento indispensable para el dominio de la energía mental. Aprender y utilizar las técnicas de concentración profunda significa manifestar nuestra capacidad mental.
VISUALIZACIÓN:Es ponerle imágenes a nuestros pensamientos, es el nexo que une el mundo físico al espiritual. Al conocer estas prácticas, pasaremos al nivel de Meditación Guiada.
Meditación Activa
Donde, por medio de movimientos corporales rítmicos y musicoterapia, se generan campos energéticos activos, armonizando y equilibrando dichos campos.
Actividades de Formación
Talleres de meditación, equilibrio energético, radiestesia, inteligencia emocional, autoestima, Kinesiología, el poder de la palabra, entre otros.
Contamos con terapias individuales para la armonización y equilibrio de campos y centros energéticos.
Coaching
Asesoría y acompañamiento para determinadas dificultades personales o profesionales, desde la metodología de la bioenergética. El coaching cumple una función importante, puesto que el camino del cambio conlleva mucha constancia y una visión clara del objetivo, que a veces se nos pierde de vista.
Este acompañamiento nos devuelve nuestra propia capacidad para estar centrados y mantenernos en estado de evolución personal. Cada persona traza su propio camino; nosotros estamos a la espera y atentos para cuando desee ese toque de atención y de confianza.
Con las prácticas de estos recursos y el coaching, se han visto resultados en disminución del estrés, buena gestión en el manejo de las situaciones, paz interior, mayor vitalidad y energía, mejor adaptación a los cambios y, por encima de todo… las personas caminan en equilibrio.